Los gobernadores de la Reserva Federal Norteamericana (Fed) votaron unánimemente a favor de sostener las tasas de interés de referencia entre el 5,25 % y el 5,50 %, anunció ayer el banco central en un comunicado tras dos días de deliberaciones.
El anuncio que hiciera el presidente de la Fed , Jerome Powell, de que el banco central podría aplicar una baja en septiembre, sería una señal de que la lucha contra la elevada inflación -que llegó a los peores niveles en cuatro décadas- estará cerca de terminar.
Esta decisión supone un ligero cambio de tono con respecto a junio, cuando el banco central señaló que se habían realizado “modestos progresos adicionales”.
“El Comité considera que los riesgos para alcanzar sus objetivos de empleo e inflación continúan moviéndose hacia un mejor equilibrio”, señaló la Reserva Federal, al agregar que está “atenta a los riesgos para ambos aspectos”.
Powell subrayó a los periodistas que los responsables de esas políticas no tomaron una decisión firme acerca de qué harán cuando se reúnan el próximo 17 y 18 de septiembre, pero sí anticipó que de continuar los indicadores económicos a ese ritmo un recorte de tasas está “sobre la mesa”.
Los banqueros centrales de Estados Unidos han dicho que sería apropiado reducir los costos de los préstamos antes de que la inflación vuelva realmente a su objetivo, para tener en cuenta el tiempo que tarda la política monetaria en afectar a la economía.
Hasta ahora la economía “ha seguido expandiéndose a un ritmo sólido”, dijo la Fed en su último comunicado, y aunque “las ganancias de empleo se han moderado”, la tasa de desempleo “sigue siendo baja”.
Sin embargo, pese a que las cifras a la baja en el desempleo y mejoras en salarios, no se ha alejado la percepción de estrés económico en los bolsillos de la media de las familias del país norteamericano.
La inflación es hasta el momento el indicador que sienten con mayor fuerza los ciudadanos de los Estados Unidos y un arma política en poder de los republicanos, quienes achacan a los demócratas los elevados precios al consumidor tras la toma de posesión de Biden, en enero de 2021.
Trump y los republicanos del Congreso instaron al banco central para que no tome medidas antes de los comicios, porque entienden que se trataría de una interferencia política, algo que rechazó Powell al afirmar que ellos solo se guían por factores económicos en sus decisiones.
Los sondeos afirman de manera consistente que la economía, el costo de la vida y la inflación es lo que más preocupa a los electores de Estados Unidos.
Atribuirse alguna victoria en este acápite previo a la cita en las urnas podría generar una opinión favorable hacia la abanderada demócrata.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, ofrecerá una rueda de prensa a las 1830 GMT para dar más detalles sobre la reunión y las perspectivas para la economía y las tasas de interés.